Por Cecilia Arias
Un lugar interesante para visitar es Huaquechula, un municipio que se localiza aproximadamente a 60 kilómetros de la capital poblana. Cuenta con muchas tradiciones y un excelente y cálido clima que te permitirán recorrer la localidad y admirar la arquitectura y la vegetación.
Probablemente habrás visto o escuchado hablar de las tradiciones que tiene ese pueblo durante Día de Muertos., razón por la cual cada año Huaquechula recibe turistas de distintos lugares del mundo que desean visitar las ofrendas tradicionales monumentales que montan en sus casas para recibir a sus muertos, quienes perdieron a algún familiar durante el último año. Esta tradición es considerada Patrimonio Cultural de los poblanos.
Es tradición que el 28 de octubre al medio día se toquen las campanas de la iglesia para que las personas salgan a formar un camino de flores de cempasúchil e incienso para guiar a las almas que próximamente las visitarán.
El día 28 de octubre se abren los altares de las personas que murieron por causa de un accidente, el 29, los altares de los infantes que fallecieron durante el año, el día 30, está dedicado a las ánimas solas, y los siguientes días a las personas mayores y adultos que fallecieron.
Todas las familias que tuvieron un difunto durante el año abren sus altares el día que corresponde para que las personas puedan visitarlo. Estas ofrendas son consideradas monumentales porque constan de tres pisos. El primero representa la vida terrenal, ahí se encuentra la foto del difunto y unas figuritas llamadas “lloroncitos”, que son figuras de niñitos que simulan llorar representando el sufrimiento de la familia por la pérdida. El segundo piso representa el cielo, ahí se coloca a la virgen María y doce angelitos. El tercer piso muestra la elevación celestial del difunto por lo que se coloca un crucifijo. Además, como en toda ofrenda, se coloca pan de muerto, frutas, las comidas favoritas de difunto, sus bebidas preferidas y a veces algunas de sus posesiones más preciadas.
Es tradición que cuando llegues a algún hogar a visitar un altar, le lleves a la familia una cera o veladora para que la coloquen en el altar de su difunto, te quedes un rato a acompañar a la familia frente al altar y ellos te ofrezcan pan, atole, chocolate, agua, tamales, o lo que su economía les permita.
Un lugar interesante para visitar es Huaquechula, un municipio que se localiza aproximadamente a 60 kilómetros de la capital poblana. Cuenta con muchas tradiciones y un excelente y cálido clima que te permitirán recorrer la localidad y admirar la arquitectura y la vegetación.
Probablemente habrás visto o escuchado hablar de las tradiciones que tiene ese pueblo durante Día de Muertos., razón por la cual cada año Huaquechula recibe turistas de distintos lugares del mundo que desean visitar las ofrendas tradicionales monumentales que montan en sus casas para recibir a sus muertos, quienes perdieron a algún familiar durante el último año. Esta tradición es considerada Patrimonio Cultural de los poblanos.
Es tradición que el 28 de octubre al medio día se toquen las campanas de la iglesia para que las personas salgan a formar un camino de flores de cempasúchil e incienso para guiar a las almas que próximamente las visitarán.
El día 28 de octubre se abren los altares de las personas que murieron por causa de un accidente, el 29, los altares de los infantes que fallecieron durante el año, el día 30, está dedicado a las ánimas solas, y los siguientes días a las personas mayores y adultos que fallecieron.
Todas las familias que tuvieron un difunto durante el año abren sus altares el día que corresponde para que las personas puedan visitarlo. Estas ofrendas son consideradas monumentales porque constan de tres pisos. El primero representa la vida terrenal, ahí se encuentra la foto del difunto y unas figuritas llamadas “lloroncitos”, que son figuras de niñitos que simulan llorar representando el sufrimiento de la familia por la pérdida. El segundo piso representa el cielo, ahí se coloca a la virgen María y doce angelitos. El tercer piso muestra la elevación celestial del difunto por lo que se coloca un crucifijo. Además, como en toda ofrenda, se coloca pan de muerto, frutas, las comidas favoritas de difunto, sus bebidas preferidas y a veces algunas de sus posesiones más preciadas.
Es tradición que cuando llegues a algún hogar a visitar un altar, le lleves a la familia una cera o veladora para que la coloquen en el altar de su difunto, te quedes un rato a acompañar a la familia frente al altar y ellos te ofrezcan pan, atole, chocolate, agua, tamales, o lo que su economía les permita.
Además de los monumentales altares en Día de Muertos, este lugar cuenta con otros atractivos turísticos como el Ex Convento de Huaquechula que data del siglo XVI, y que al finalizar su construcción quedó a manos de Fray Juan de Alameda y era habitado por los franciscanos.
Ahora es un museo que puedes visitar: El acceso cuesta $40.00 pesos, pero con credencial de estudiante o de INAPAM, tu entrada es completamente gratuita.
Otro atractivo turístico de interés es el zócalo, en el centro de Huaquechula, donde se pueden apreciar varias piedras prehispánicas como la del Sol y la Luna y la piedra del Coyote, por mencionar algunas.
¡Anímate a visitar Huaquechula y descubre un poco más sobre su historia y tradiciones en cualquier época del año!
¡Anímate a visitar Huaquechula y descubre un poco más sobre su historia y tradiciones en cualquier época del año!