Por: Wendy S. Perdomo
El taekwondo es un arte marcial que requiere de mucha disciplina y constancia, así lo comentó Diana Waldo, quien es taekwondoin del Centro de entrenamiento marcial de Santa Rita Tlahuapan en San Martín. Diana comenzó por contarnos cómo es que se inició en esta disciplina. “Es una larga historia, yo era una persona que no hacía nada de ejercicio”, nos dice Fue entonces que su mejor amiga quien ya practicaba taekwondo la desafió ir a una de sus clases, argumentándole que no aguantaría. “Fui a la clase y ese día me acuerdo que estaban practicando pateo en costales, me cansé mucho”, reconoce. Después de esto el reto subió a un mes, el cual ella aceptó. Faltando de dos a tres semanas para salir de la Preparatoria, ya lo practicaba de lleno. Sin embargo en el cambio hacia la Universidad tuvo que dejarlo porque el profesor con el que entrenaba no podía dar clases los sábados. “Había un gimnasio cerca de mi casa… yo no quería entrar con ese profesor, porque me daba miedo”, nos explica. Sin embargo al no haber otra alternativa, decidió ir a ese gimnasio cerca de su casa, explicándole al profesor de nombre Severino la situación de que por los tiempos en la universidad solo podría asistir los fines de semana. Así empezó a hacer sus exámenes para subir de principiante a cinta amarilla. “Para los cambios de cintas evalúan que tengas espíritu, que se demuestre seguridad, defensa y patadas básicas”, nos cuenta. Actualmente Diana es cinta roja. Nos cuenta que le ha costado bastante subir su nivel pues varias veces después de un combate, ha llegado a pensar que sus cualidades no son las adecuadas para esta disciplina. “Es muy difícil. Donde yo entreno la mayoría son niños y adolescentes entre 13 y 16 años… es muy raro encontrar alguien mayor, el tiempo de un competidor termina a los 26 años”, asegura. Sin embargo sus profesores e incluso sus compañeros se han encargado de darle la motivación suficiente para continuar, pues le hacen ver que no va a tener las mismas cualidades que sus compañeros más jóvenes. A su edad, ella tendría más técnica y fuerza entre los de su categoría. |
Waldo ha participado en 3 torneos que ella considera como importantes, el primero fue un Challenger, que es uno de los eventos más grandes de taekwondo realizado en la ciudad de Puebla. Son tres días de competencias, el primero es para las selecciones, el segundo es para Poomsae o formas y el tercero es la competencia de todas las cintas. En este torneo obtuvo el tercer lugar en la competencia de Poomsae siendo cinta amarilla. El segundo fue el torneo Independencia que también se realiza en la ciudad de Puebla, el cual es más local, porque solo acuden escuelas de los municipios más cercanos a la ciudad. El último fue una competencia realizada en San Martín, la cual ella nos describe como un evento propio del Centro Marcial donde entrena. Este evento es más grande debido a que varias de estas escuelas tienen seleccionados nacionales y por lo tanto crean eventos y seminarios.
Ella nos cuenta: “El fundador David Deibis, que es un entrenador, fue compañero de Octavio Villa y Damián Villa, seleccionados nacionales que salieron de la misma escuela”. Ha habido otros eventos de carácter interno en los que Diana ha obtenido primeros y segundos lugares. El último torneo en el que participó se llevó a cabo el pasado domingo en el cual resultó con un combate ganado y uno perdido dentro de su categoría. Nos comentó que a pesar de la gran pasión que siente por este deporte, no está dentro sus prioridades ir a torneos más profesionales debido a que no se considera lo suficientemente preparada. Por último Diana también nos contó su opinión respecto al apoyo que recibe esta disciplina a nivel nacional. Nos comenta que el taekwondo casi no recibe apoyo por parte del gobierno como sucede con otros deportes, ya que por la experiencia de una de sus compañeras en la selección de Puebla sabe que el derroche económico para cubrir estos gastos es muy alto debido a que siendo seleccionados se requiere financiar el traslado a seminarios y torneos para subir en los rankings nacionales. “El tae requiere mucho, requiere equipo, requiere seminarios…por ejemplo, un peto electrónico es carísimo”, finaliza Diana. |