Primer mes (de la primera a la cuarta semana de gestación)
Para los padres, es el clímax de una noche, para su hijo, el comienzo de la existencia: la vida de tu bebé comienza cuando un espermatozoide fertiliza uno de tus óvulos. Al cabo de media hora, el huevo fertilizado se va dividiendo en numerosas células mientras viaja por la trompa de Falopio hacia el útero para implantarse en su pared donde continuará su desarrollo.
Para los padres, es el clímax de una noche, para su hijo, el comienzo de la existencia: la vida de tu bebé comienza cuando un espermatozoide fertiliza uno de tus óvulos. Al cabo de media hora, el huevo fertilizado se va dividiendo en numerosas células mientras viaja por la trompa de Falopio hacia el útero para implantarse en su pared donde continuará su desarrollo.
Pocos días después, un test de embarazo ya puede avisar que un bebé está en camino.
Segundo mes (de la quinta a la octava semana de gestación)
Poco a poco percibes que un pequeño ser crece dentro de ti. En la quinta semana ya tiene un pequeño corazoncito que comienza a latir y aparecen las diminutas manitas y pies. Unos días después, el embrión ya puede girar su cabecita. A finales del segundo mes ya están formados todos sus órganos y sistemas. Tu bebé se mueve de modo perceptible: su tórax sube y baja rítmicamente como si respirara y puede estirarse y encogerse. Sus experiencias sensoriales influyen en el desarrollo de su cerebro. A finales del segundo mes tu bebé ya mide unos dos centímetros y pesa unos diez gramos
Segundo mes (de la quinta a la octava semana de gestación)
Poco a poco percibes que un pequeño ser crece dentro de ti. En la quinta semana ya tiene un pequeño corazoncito que comienza a latir y aparecen las diminutas manitas y pies. Unos días después, el embrión ya puede girar su cabecita. A finales del segundo mes ya están formados todos sus órganos y sistemas. Tu bebé se mueve de modo perceptible: su tórax sube y baja rítmicamente como si respirara y puede estirarse y encogerse. Sus experiencias sensoriales influyen en el desarrollo de su cerebro. A finales del segundo mes tu bebé ya mide unos dos centímetros y pesa unos diez gramos
Tercer mes (de la novena a la 12ª semana de gestación)
Tu bebé siente la excitación, la alegría o el estrés. A partir de la décima semana de gestación puede sentir estímulos en su piel. Su hígado comienza a producir bilis y aproximadamente al finalizar el tercer mes bebe ya líquido amniótico y lo expulsa después. Con ese gesto de tragar entrena pulmones y riñones. La corteza cerebral empieza también a crecer para convertirse en el futuro en la parte del cerebro que, según los científicos, alberga su personalidad. Tu bebé participa en tu vida. Si te asustan, la adrenalina liberada en tu sangre le provoca palpitaciones. A finales del tercer mes el feto mide unos seis centímetros y pesa unos 23 gramos.
Tu bebé siente la excitación, la alegría o el estrés. A partir de la décima semana de gestación puede sentir estímulos en su piel. Su hígado comienza a producir bilis y aproximadamente al finalizar el tercer mes bebe ya líquido amniótico y lo expulsa después. Con ese gesto de tragar entrena pulmones y riñones. La corteza cerebral empieza también a crecer para convertirse en el futuro en la parte del cerebro que, según los científicos, alberga su personalidad. Tu bebé participa en tu vida. Si te asustan, la adrenalina liberada en tu sangre le provoca palpitaciones. A finales del tercer mes el feto mide unos seis centímetros y pesa unos 23 gramos.
Cuarto mes (de la 13ª a la 16ª semana de estación)
Es ahora cuando crecen las “turbulencias” en tu vientre. Las vías nerviosas del cuerpo de tu bebé se han unido ya de tal forma que puede girarse, flotar e incluso dar volteretas. El bebé tiene aún mucho espacio y en sus “aventuras” puede tocar ligeramente la pared del útero. Muchas embarazadas sienten este tierno movimiento alrededor de la 15ª semana. Poco a poco se mueven también los globos oculares del feto, aún bajo los párpados firmemente cerrados. A finales del cuarto mes de embarazo tu bebé mide unos 16 centímetros y pesa alrededor de 100 gramos.
Es ahora cuando crecen las “turbulencias” en tu vientre. Las vías nerviosas del cuerpo de tu bebé se han unido ya de tal forma que puede girarse, flotar e incluso dar volteretas. El bebé tiene aún mucho espacio y en sus “aventuras” puede tocar ligeramente la pared del útero. Muchas embarazadas sienten este tierno movimiento alrededor de la 15ª semana. Poco a poco se mueven también los globos oculares del feto, aún bajo los párpados firmemente cerrados. A finales del cuarto mes de embarazo tu bebé mide unos 16 centímetros y pesa alrededor de 100 gramos.
Quinto mes (de la 17ª a la 20ª semana de gestación):
Tu bebé tiene que seguir creciendo y entrenándose para la vida fuera del útero. En este mes desarrolla el sentido del gusto. En la 20ª semana de gestación, tiene diez veces más receptores de sabores en su boca que después de nacer. Le gusta todo lo que sabe dulce. Los científicos han descubierto que al feto le encanta beber líquido amniótico cuando está enriquecido con algo que contenga azúcar. También los oídos del bebé se preparan para recibir sonidos: sin embargo, al principio solo oyen tus latidos cardiacos y el ruido que hacen tus tripas, así como tu voz. A finales del quinto mes, tu bebé mide unos 25 centímetros y pesa unos 380 gramos.
Tu bebé tiene que seguir creciendo y entrenándose para la vida fuera del útero. En este mes desarrolla el sentido del gusto. En la 20ª semana de gestación, tiene diez veces más receptores de sabores en su boca que después de nacer. Le gusta todo lo que sabe dulce. Los científicos han descubierto que al feto le encanta beber líquido amniótico cuando está enriquecido con algo que contenga azúcar. También los oídos del bebé se preparan para recibir sonidos: sin embargo, al principio solo oyen tus latidos cardiacos y el ruido que hacen tus tripas, así como tu voz. A finales del quinto mes, tu bebé mide unos 25 centímetros y pesa unos 380 gramos.
Sexto mes (entre la 21ª y la 24ª semana de gestación)
El bebé se toca la cara con sus manitas y se chupa el dedo. Con un poco de suerte, en la ecografía que se hace en torno a la 20ª semana de embarazo puedes observar ya cómo lo hace. Quizá juegue también con el cordón umbilical, pues ya funciona su reflejo de agarre. Le interesa su cuerpo, acaricia su cara, se toca sus bracitos y piernas. Además, sus movimientos se hacen más rápidos. Tu bebé puede sentir dolor, se atraganta de vez en cuando con el líquido amniótico y tiene hipo, algo que sentirás como suaves empujoncitos en la pared abdominal. Al finalizar el sexto mes, tu bebé mide unos 30 centímetros y pesa entre 600 y 700 gramos.
El bebé se toca la cara con sus manitas y se chupa el dedo. Con un poco de suerte, en la ecografía que se hace en torno a la 20ª semana de embarazo puedes observar ya cómo lo hace. Quizá juegue también con el cordón umbilical, pues ya funciona su reflejo de agarre. Le interesa su cuerpo, acaricia su cara, se toca sus bracitos y piernas. Además, sus movimientos se hacen más rápidos. Tu bebé puede sentir dolor, se atraganta de vez en cuando con el líquido amniótico y tiene hipo, algo que sentirás como suaves empujoncitos en la pared abdominal. Al finalizar el sexto mes, tu bebé mide unos 30 centímetros y pesa entre 600 y 700 gramos.
Séptimo mes (de la 25ª a la 28ª semana de gestación)
El bebé reacciona con curiosidad hacia las fuentes de luz. Poco a poco el feto comienza a dirigir sus “antenas” al mundo exterior. Ya percibe lo que pasa fuera (ruidos del tráfico, voces de otras personas o música) y también desarrolla preferencias, como por la música suave. En este momento sus ojos ya están unidos a la corteza cerebral a través de las vías nerviosas. En torno a la 26ª semana de embarazo tu bebé abrirá los párpados por primera vez. Aunque solo le llega alrededor del uno por ciento de la luz diurna, ya es sensible a la misma y mira con curiosidad en una dirección cuando colocas sobre tu vientre una fuente de luz fuerte, como, una lámpara de mesa. En esta etapa, el feto ya tiene una rutina, se despierta y duerme varias veces al día. A finales del séptimo mes de gestación tu bebé mide entre 35 y 38 centímetros y pesa entre 1.000 y 1.200 gramos.
El bebé reacciona con curiosidad hacia las fuentes de luz. Poco a poco el feto comienza a dirigir sus “antenas” al mundo exterior. Ya percibe lo que pasa fuera (ruidos del tráfico, voces de otras personas o música) y también desarrolla preferencias, como por la música suave. En este momento sus ojos ya están unidos a la corteza cerebral a través de las vías nerviosas. En torno a la 26ª semana de embarazo tu bebé abrirá los párpados por primera vez. Aunque solo le llega alrededor del uno por ciento de la luz diurna, ya es sensible a la misma y mira con curiosidad en una dirección cuando colocas sobre tu vientre una fuente de luz fuerte, como, una lámpara de mesa. En esta etapa, el feto ya tiene una rutina, se despierta y duerme varias veces al día. A finales del séptimo mes de gestación tu bebé mide entre 35 y 38 centímetros y pesa entre 1.000 y 1.200 gramos.
Octavo mes (de la 29ª a la 32ª semana de gestación)
El feto está cada vez más despierto y reacciona al contacto exterior. Siente cuándo colocas con ternura la mano sobre tu vientre o cuándo tu pareja presiona suavemente tu tripa con un dedo. Quizás el niño “responda” empujando también o acurrucándose desde dentro en el lugar donde se encuentra la mano. Al finalizar el octavo mes de embarazo, tu bebé ya mide entre 40 y 42 centímetros y pesa entre 1.700 y 2.000 gramos.
El feto está cada vez más despierto y reacciona al contacto exterior. Siente cuándo colocas con ternura la mano sobre tu vientre o cuándo tu pareja presiona suavemente tu tripa con un dedo. Quizás el niño “responda” empujando también o acurrucándose desde dentro en el lugar donde se encuentra la mano. Al finalizar el octavo mes de embarazo, tu bebé ya mide entre 40 y 42 centímetros y pesa entre 1.700 y 2.000 gramos.
Un pensamiento tranquilizador: si tu hijo llegara en estos momentos al mundo, ya podría vivir con ayuda médica. Sin embargo, este inicio prematuro de la vida sería aún bastante problemático, pues habría que apoyar con medicamentos la maduración de los pulmones y el bebé sería muy vulnerable a infecciones, además de tener que ser alimentado artificialmente. El cuerpo del bebé está cubierto de lanugo, una fina pelusilla encargada, junto a la membrana llamada amnios, de que la piel del bebé no se reblandezca con el líquido amniótico.
Noveno mes (de la 33ª a la 36ª semana de gestación)
La cuenta atrás para el nacimiento corre, el bebé practica para la vida “real”. En tu seno tiene relativamente poco espacio, por lo que apenas puede girarse ya. Ahora traga diariamente hasta tres litros de líquido amniótico y entrena así el estómago, las tripas y la vejiga. Se chupa el dedo con frecuencia y patalea con fuerza: así logra que su piel sea masajeada por la pared del útero. También abre ya los ojos con mayor frecuencia. A finales del noveno mes tu bebé mide unos 47 centímetros y pesa entre 2.500 y 3.000 gramos.
Noveno mes (de la 33ª a la 36ª semana de gestación)
La cuenta atrás para el nacimiento corre, el bebé practica para la vida “real”. En tu seno tiene relativamente poco espacio, por lo que apenas puede girarse ya. Ahora traga diariamente hasta tres litros de líquido amniótico y entrena así el estómago, las tripas y la vejiga. Se chupa el dedo con frecuencia y patalea con fuerza: así logra que su piel sea masajeada por la pared del útero. También abre ya los ojos con mayor frecuencia. A finales del noveno mes tu bebé mide unos 47 centímetros y pesa entre 2.500 y 3.000 gramos.
Décimo mes (de la 37ª a la 40ª semana de gestación)
¡Le tranquiliza tu voz! La memoria funciona ya en el vientre materno. Para estar preparado para las futuras oscilaciones de temperatura tras su nacimiento, tu bebé necesita un panículo de grasa adecuado, algo que desarrolla en las últimas semanas. Todos sus órganos están listos para entrar en funcionamiento y también las bases del cerebro están puestas: más de cien mil millones de neuronas esperan a ser “alimentadas”, en su mayor parte por las experiencias que tu bebé tendrá después de nacer. Los investigadores descubrieron que los fetos en la 37ª semana de embarazo son capaces de retener una serie de sonidos durante al menos 24 horas. Después de la 40ª semana, tu bebé abandona el entorno en el que se ha desarrollado y entonces le beneficia todo lo que ha estado practicando: le tranquiliza tu voz, que le resulta tan familiar, bebe tu leche y disfruta de la seguridad que le proporciona estar entre tus brazos.
¡Le tranquiliza tu voz! La memoria funciona ya en el vientre materno. Para estar preparado para las futuras oscilaciones de temperatura tras su nacimiento, tu bebé necesita un panículo de grasa adecuado, algo que desarrolla en las últimas semanas. Todos sus órganos están listos para entrar en funcionamiento y también las bases del cerebro están puestas: más de cien mil millones de neuronas esperan a ser “alimentadas”, en su mayor parte por las experiencias que tu bebé tendrá después de nacer. Los investigadores descubrieron que los fetos en la 37ª semana de embarazo son capaces de retener una serie de sonidos durante al menos 24 horas. Después de la 40ª semana, tu bebé abandona el entorno en el que se ha desarrollado y entonces le beneficia todo lo que ha estado practicando: le tranquiliza tu voz, que le resulta tan familiar, bebe tu leche y disfruta de la seguridad que le proporciona estar entre tus brazos.