A muchos nos gusta ir de viaje, pues yo lo considero uno de los grandes placeres de la vida. Nos encantaría ver un lugar bonito, preparar la maleta, hacerla y empezar la aventura. Así sin más, sin pensarlo. Pero antes viene la peor parte: la organización. Mirar el hospedaje, ver qué rutas hay desde tu casa hasta tu destino, y desde allí mirar otros lugares que quieras visitar. No todo son quejas. Hay una solución: las agencias de viajes. En la ciudad de Puebla hay numerosas empresas que pueden ayudarte a viajar de forma fácil.
Conocer México para un extranjero ha sido una de mis mayores aventuras, y más aún cuando son lugares que has escuchado hablar o has visto en fotografías, pero que no sabes cómo arreglártelas para llegar hasta allí. Primero que todo, quiero dejar claro que no intento hacer propaganda, sino dar mi punto de vista de la forma más objetiva posible. Viajes MH es una de las agencias que más he utilizado para conocer el país, y ahora os cuento el porqué. He conocido de la mano de ellos la ciudad de Acapulco, el estado de Veracruz, Oaxaca y sus playas, Vallarta y Guadalajara, y la Huasteca Potosina. Uno de sus puntos más fuertes y que más me ha impresionado para ser México es la organización. Por lo que a mí me transmiten, los viajes son planeados con total atención, haciendo hincapié en lugares conocidos, populares y que agradan siempre (o casi siempre), pues llevan más de cinco años de experiencia en el sector turístico.
La puntualidad, algo que tampoco caracteriza a los mexicanos, la suelen tener en cuenta. Las salidas, siempre en puntos céntricos de la ciudad, no suele alargarse más de los 10 minutos -salvo por los percances de otras personas-. La llegada a los destinos siempre ha sido a la hora marcada, excepto cuando ha habido algún atraso por accidente en carretera o incidencia con el autobús, que si nos ponemos a contar anécdotas, hay bastantes. Otra de las cosas que me agrada es el coste del paquete. Muchas personas de la ciudad dicen que es bastante asequible y que es barato. En este paquete se incluye siempre el transporte, seguro de viaje, y varios operadores y hospedaje en caso de un viaje largo, además de las entradas o tours que vayamos a realizar. Los hoteles en los que pasamos la noche no son nada del otro mundo, ya que suelen ser habitaciones muy simples, cuádruples y capacitadas con termostato y un baño completo. Pero en verdad, ¿qué más se necesita para pasar la noche? Porque otras de las cosas, -para mi buena- es que sales temprano y no regresas al hotel hasta que anochece.
No puede pasar por desapercibida la atención de Mario, el organizador. Comienza cuando le preguntas por más información del viaje, ya que intenta que estés bastante informado, y te da las indicaciones necesarias para el viaje. Sigue cuando subes al autobús, interesándose si vas cómodo o si necesitas que hagan alguna parada. No acaba aquí, ya que cuando llegas al destino y estando allí, también se interesan por tu bienestar y te aconseja las zonas más turísticas.
He tenido la oportunidad de viajar con otras empresas, también bastante buenas, como por ejemplo Intégrate Puebla, pero a diferencia de la anterior, está se centra más en disfrutar el momento que disfrutar la estancia. Por lo contrario, un punto negativo -aunque para muchos es positivo- es la cantidad de lugares que visitas en un solo viaje.
Por ejemplo, en el viaje a Oaxaca hicimos dos noches en hotel y otras dos en el autobús (la primera y la última) porque sale más económico y puedes ver más cosas; y después de pasar la noche sentado intentando estar cómodo para descansar -porque vamos a ser claros, dormir en un autobús a nadie le gusta-, no me gusta hacer muchas paradas. Ese último día te levantas con los pies hinchados, enfadado porque no has descansado lo suficiente y con ganas de pegarte una ducha. Paramos en tres sitios diferentes: Hierve el agua, la zona arqueológica de Mitla y una fábrica de mezcal. En verdad, está bien visitar cuantas más cosas mejor, pero en ese momento no lo ves así.
Solo puedo decir que ha sido un placer viajar con ellos, pese a algunos pequeños percances, pero todo queda en una anécdota más. No he tenido la oportunidad de viajar con muchas empresas, pero seguramente sean igual de buenas.
Conocer México para un extranjero ha sido una de mis mayores aventuras, y más aún cuando son lugares que has escuchado hablar o has visto en fotografías, pero que no sabes cómo arreglártelas para llegar hasta allí. Primero que todo, quiero dejar claro que no intento hacer propaganda, sino dar mi punto de vista de la forma más objetiva posible. Viajes MH es una de las agencias que más he utilizado para conocer el país, y ahora os cuento el porqué. He conocido de la mano de ellos la ciudad de Acapulco, el estado de Veracruz, Oaxaca y sus playas, Vallarta y Guadalajara, y la Huasteca Potosina. Uno de sus puntos más fuertes y que más me ha impresionado para ser México es la organización. Por lo que a mí me transmiten, los viajes son planeados con total atención, haciendo hincapié en lugares conocidos, populares y que agradan siempre (o casi siempre), pues llevan más de cinco años de experiencia en el sector turístico.
La puntualidad, algo que tampoco caracteriza a los mexicanos, la suelen tener en cuenta. Las salidas, siempre en puntos céntricos de la ciudad, no suele alargarse más de los 10 minutos -salvo por los percances de otras personas-. La llegada a los destinos siempre ha sido a la hora marcada, excepto cuando ha habido algún atraso por accidente en carretera o incidencia con el autobús, que si nos ponemos a contar anécdotas, hay bastantes. Otra de las cosas que me agrada es el coste del paquete. Muchas personas de la ciudad dicen que es bastante asequible y que es barato. En este paquete se incluye siempre el transporte, seguro de viaje, y varios operadores y hospedaje en caso de un viaje largo, además de las entradas o tours que vayamos a realizar. Los hoteles en los que pasamos la noche no son nada del otro mundo, ya que suelen ser habitaciones muy simples, cuádruples y capacitadas con termostato y un baño completo. Pero en verdad, ¿qué más se necesita para pasar la noche? Porque otras de las cosas, -para mi buena- es que sales temprano y no regresas al hotel hasta que anochece.
No puede pasar por desapercibida la atención de Mario, el organizador. Comienza cuando le preguntas por más información del viaje, ya que intenta que estés bastante informado, y te da las indicaciones necesarias para el viaje. Sigue cuando subes al autobús, interesándose si vas cómodo o si necesitas que hagan alguna parada. No acaba aquí, ya que cuando llegas al destino y estando allí, también se interesan por tu bienestar y te aconseja las zonas más turísticas.
He tenido la oportunidad de viajar con otras empresas, también bastante buenas, como por ejemplo Intégrate Puebla, pero a diferencia de la anterior, está se centra más en disfrutar el momento que disfrutar la estancia. Por lo contrario, un punto negativo -aunque para muchos es positivo- es la cantidad de lugares que visitas en un solo viaje.
Por ejemplo, en el viaje a Oaxaca hicimos dos noches en hotel y otras dos en el autobús (la primera y la última) porque sale más económico y puedes ver más cosas; y después de pasar la noche sentado intentando estar cómodo para descansar -porque vamos a ser claros, dormir en un autobús a nadie le gusta-, no me gusta hacer muchas paradas. Ese último día te levantas con los pies hinchados, enfadado porque no has descansado lo suficiente y con ganas de pegarte una ducha. Paramos en tres sitios diferentes: Hierve el agua, la zona arqueológica de Mitla y una fábrica de mezcal. En verdad, está bien visitar cuantas más cosas mejor, pero en ese momento no lo ves así.
Solo puedo decir que ha sido un placer viajar con ellos, pese a algunos pequeños percances, pero todo queda en una anécdota más. No he tenido la oportunidad de viajar con muchas empresas, pero seguramente sean igual de buenas.