“Don't make it new; make it whole.”
― Alex Ross
Por: Josué R. Lopéz Valdez
En el mundo existen personas con un talento especial, algunas cantan muy bien, otras bailan extraordinariamente, otras simplemente pueden ser muy buenas en algún deporte, pero para Nelson Alexander Alex Ross ese talento sería el de dibujar y entintar como nadie lo ha hecho.
Parte de su talento radica en ser creativo, en el sentido de tomar algo y no renovarlo, si no hacerlo mejor. El inicio de todo esto se debe en gran parte a su madre Lynette Ross quien fue diseñadora de modas, y también ilustradora de libros. Con esta figura materna el fue poco a poco tomándole interés a la pintura, tal interés llevaría en 1987 al joven Ross a la American Academy of Art a realizar sus estudios. Después fue dibujante de storyboards para spots publicitarios en la agencia Leo Burnett en Chicago en donde crearía y posteriormente perfeccionaría su técnica de dibujo. Para quien no lo sepa aun, su técnica es única ya que solo usa lápiz, acuarelas y estilógrafo llegando a darle a la ilustración una impresión de fotografía realista.
Varios años después y gracias a una compañera de trabajo, entra a la editorial Now Comics siendo Terminator, the Burning Earth (1990), su primer trabajo oficial como ilustrador.
Una leyenda había nacido.
Parte de su talento radica en ser creativo, en el sentido de tomar algo y no renovarlo, si no hacerlo mejor. El inicio de todo esto se debe en gran parte a su madre Lynette Ross quien fue diseñadora de modas, y también ilustradora de libros. Con esta figura materna el fue poco a poco tomándole interés a la pintura, tal interés llevaría en 1987 al joven Ross a la American Academy of Art a realizar sus estudios. Después fue dibujante de storyboards para spots publicitarios en la agencia Leo Burnett en Chicago en donde crearía y posteriormente perfeccionaría su técnica de dibujo. Para quien no lo sepa aun, su técnica es única ya que solo usa lápiz, acuarelas y estilógrafo llegando a darle a la ilustración una impresión de fotografía realista.
Varios años después y gracias a una compañera de trabajo, entra a la editorial Now Comics siendo Terminator, the Burning Earth (1990), su primer trabajo oficial como ilustrador.
Una leyenda había nacido.
Tras varios números y muchas ofertas de distintas editoriales, ya que muchas personas quedaron encantadas con su técnica de dibujo, incursiona en el mundo de comics de superhéroes con un especial de Superman: Doomsday & Beyond (1993).
Más tarde conocería a Kurt Busiek con quien colaboraría en una obra aclamada por muchos y admirada por todos, MARVELS (1994), quien le daría más reconocimiento a el ya famoso Ross.
Sin embargo, su colaboración definitiva seria Kingdom Come, producida por de DC comics, el cual no solo es uno de sus mejores trabajos, si no que para muchos es una historia sin igual, una obra de arte en toda su extensión.
De ahí en adelante se dio lugar a una prometedora carrera en el mundo de los comics, actualmente se dedica a crear ilustraciones independientes. Hasta el día de hoy sigue siendo uno de los ilustradores más reconocidos y sin duda unos de los mejores.